Estos dragones poseen unas preciosas escamas muy brillantes, de color bronce, y su tamaño es más que considerable. Habitan en climas tropicales y lugares de mucha humedad, como los lagos.
Son amistosos con los humanos y semihumanos, y les gusta observarlos en su rutina. Para ello, se transforman en un animal pequeño, ya que tienen la capacidad de polimorfizarse.
Su aliento tiene dos formas; la de rayo eléctrico y la de nube de gas de repulsión. Además, los dragones broncíneos pueden lanzar conjuros para crear muros de niebla y controlar el clima.
Aunque sus guaridas son secas, están situadas cerca de pequeños mares, lagos y ríos. Son excelentes nadadores y les encanta bucear para buscar perlas y tesoros. Se muestran amistosos con otros seres marinos como sirenas, delfines y elfos de mar, aunque no lo son tanto con los piratas. De hecho, los dragones broncíneos destrozan barcos piratas en cuanto tienen oportunidad.
Estos dragones tienen una tarea muy importante y están comenzando a trabajar junto a nosotros aquí en la Tierra.
Uno de sus propósitos es facilitar el cambio repentino y ayudar a las personas y a los planetas del Universo a lidiar con las consecuencias de ello.
Cuando las personas se iluminan con energía renovada, una gran manada de dragones color bronce vuelan sobre ellas extendiendo esa luz que irradian sobre más personas y lugares con esperanza de que también despierten y hagan crecer su luz.
Estos dragones también ofrecen apoyo a los que se arriesgan a ascender acompañándolos en su camino y, a veces en su soledad.
Naturaleza en Armonía 