Como hemos visto, las hadas son poderosas curanderas, magas y maestras.
Cualquiera que trabaje con hadas comienza a darse cuenta de que todo en este planeta está vivo, incluidos los objetos aparentemente inanimados, como las rocas.
El espíritu omnipresente de amor y luz está encarnado en toda la Naturaleza. Dios está en todos lados. Este Espíritu se manifiesta en muchas formas, incluyendo personas, animales, plantas y el reino elemental.